La ley del Trabajo no será reformada. La orden fue hacer una nueva ley encaminada al socialismo, el mismo que fue rechazado en el referendo de la reforma constitucional del 2 de diciembre de 2007. El diputado Oscar Figuera, presidente de la Comisión de Desarrollo Social de la Asamblea Nacional (AN), aclaró que no están elaborando una ley socialista, pero sí una ley que le abra el camino al socialismo.
"Los revolucionarios trabajamos por una ley de transición que le abra el camino a un proyecto en el que nosotros creemos, que permita romper con el principio de que la ley del Trabajo es un gran contrato colectivo, porque si es así no tendrían sentido los contratos colectivos y los sindicatos (...) La crisis capitalista se resuelve avanzando hacia un nuevo modelo de producción social, que es el socialismo. Necesitamos cambiar el paradigma del capitalismo y avanzar hacia la producción social y colectiva. Eso debe expresarse en la nueva ley Orgánica del Trabajo".
El parlamentario dijo que su aspiración es que la nueva ley Orgánica del Trabajo se apruebe este año, pero advirtió que todo dependerá de la dinámica con que se dé el debate. Adelantó además, que en el camino es posible que surjan propuestas de elaboración o reforma de otras leyes relacionadas, y entre éstas podría estar una ley que penalice a los patrones que no respeten las decisiones del Ministerio del Trabajo.
Gremios exigen
La Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV) estuvo presente con Froilán Barrios y Pablo Castro. Este último alertó que si el oficialismo plantea una transición al socialismo debe reformar la Constitución, de lo contrario estaría violándola y desconociendo la voluntad popular expresada el 2 de diciembre de 2007. Pidió además que la nueva ley del Trabajo no sea sólo la visión de una parcialidad política e ideológica. Destacó que las propuestas de la CTV están orientadas a garantizar el ahorro de los trabajadores sin que se los coma la inflación y respetar la autonomía y libertad sindical.
Por otro lado, Stalin Pérez, coordinador de la Unión Nacional de Trabajadores (UNT), hizo énfasis en la necesidad de concretar la reducción de la jornada laboral, que -según advirtió Oscar Figuera- no se le está dando importancia, ya que se habría dicho que eso no era tan importante como evitar la explotación. El representante del gremio oficialista propone la eliminación de la tercerización, por considerarla discriminatoria y carente de beneficios; además, pidió incorporar sanciones a los patronos que descarten las órdenes de reenganche, entre los que se cuenta al Estado venezolano.
Prensa: www.laverdad.com
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